Si no fuera porque enarbola las peores causas, el presidenciable de la ultraderecha sería un personaje de caricatura. (La Jornada, Contraportada)
EL ESPERADÍSIMO anuncio de Marcelo Ebrard fue como el parto de los montes: salió un ratoncito en medio de tanto estremecimiento. Sus propios compañeros de causa esperaban un pronunciamiento poquito más fuerte o, al menos, claro de cuál sería su nueva ruta.
PERO la sorpresa fue que el ex precandidato presidencial salió con que va a esperar a que la Comisión de Honestidad de Morena -no se rían que así se llama- resuelva sus impugnaciones al cúmulo de irregularidades que caracterizaron al proceso. Y que si la resolución es que las cosas se quedan como están, a él ya no le interesa seguir en ese partido. O sea que sí, pero no. O no, pero sí, por ahora.
¿PARA QUÉ Ebrard se esperaría a la resolución de un organismo que, evidentemente, va a desechar su impugnación? Hasta Gerardo Fernández Noroña ha reconocido que todo fue un show para favorecer a Claudia Sheinbaum pero, ¡qué caray!, le entraron sabiendo que todo ya estaba planchado en favor de la ex jefa del gobierno capitalino.
EL EX CANCILLER parece más bien estar ganando tiempo simplemente para que se enfríe su protesta y, llegado el momento, doblar las manos dócilmente… una vez más.
POCOS se enteraron, pero hace unos días compareció ante el Senado estadounidense el subsecretario para Asuntos Antinarcóticos del Departamento de Estado, Todd Robinson. Y entre las muchas cosas que dijo fue que si bien la cooperación antidrogas con México es buena, hay un detalle muy preocupante; que el gobierno de López Obrador no parece interesado en combatir a los cárteles del narcotráfico, pues no destina recursos suficientes. ¡Ouch!
EL COLMO es que AMLO fue a Colombia a hablar de la necesidad de un nuevo enfoque en el combate a las drogas, pero se le vio muy, pero muy incómodo cuando su anfitrión, el colombiano Gustavo Petro relató cómo el narcotráfico se metió en todos los niveles del gobierno e, inclusive, dominaba a funcionarios del Ejecutivo y del Legislativo. Conste: estaba hablando de Colombia, no de México, pero López Obrador hacía unas caras muuuy extrañas.
ALLÁ en Jalisco la grilla está más picosa que una torta ahogada. Y es que luego de que se destapó el senador Clemente Castañeda para la gubernatura, hoy le toca el turno al alcalde tapatío, Pablo Lemus. Pese a que se trata de un informe de labores municipal, resulta que asistirán dos de los principales cuadros de Movimiento Ciudadano: el gobernador Samuel García y el alcalde Luis Donaldo Colosio. Hasta anoche estaba por confirmarse la presencia del líder de MC, Dante Delgado. Con esta porra en las gradas, resulta evidente que Lemus va con todo en su búsqueda de la gubernatura… aunque Enrique Alfaro tenga otros planes para su sucesión. (F. Bartolomé, Reforma, Opinión, p. 8)
Comienzan morenistas a abandonar el barco Ebrard
Nos hacen ver que mientras continúa el culebrón de Marcelo Ebrard, y define su futuro político, algunos de los senadores que le dieron su apoyo comienzan a abandonar el barco. Nos dicen que don Marcelo contaba con 14 senadores afines, pero con el correr de las horas se han bajado cuatro, y ya nada más le quedan 10. Nos cuentan que solo los más cercanos al proyecto marcelista se la jugarán con él y lo esperarán a que decida lo que quiere hacer. La desbandada podría crecer, e incluso expandirse a la Cámara de Diputados, pues muchos de los legisladores planean reelegirse en 2024 y si abandonan las filas de Morena tendrían que dejar sus escaños el 31 de agosto del próximo año. Algunos apuestan a que haya un arreglo de Ebrard con Morena y que le entreguen algunas senadurías y diputaciones para su grupo político. Ya se verá en las próximas semanas cuántos senadores mantienen la fidelidad a Ebrard y cuántos prefieren decirle adiós a su Movimiento con tal de asegurar su lugar en el Legislativo, y desde luego, no quedarse fuera del presupuesto.
Prácticas gansteriles en torno al Metro
Nos cuentan comerciantes que en el Metro empiezan a surgir personas que se jactan de ser muy cercanas a la recién electa coordinadora de la Defensa de la autollamada Cuarta Transformación. Una de ellas, nos dicen, es un hombre llamado Raúl Martínez Herrera, quien hace unos días amenazó a comerciantes. Aseguran que les dijo que tiene la “autorización” de la doctora Sheinbaum para hacerse cargo total del área de Permisos Administrativos Temporales, por lo que “empezaría el desalojo de locales” para acomodar a gente cercana a la virtual candidata presidencial. Los comerciantes dudan que en el equipo de la exjefa de Gobierno se apoye este tipo de acciones que afectan gravemente la economía de cientos de familias, pero no estaría de sobra que se deslindaran de este tipo de actitudes, que se acercan a lo gansteril.
Mañanera dinámica y sin ataques
Rápida, concisa y sin tanto rollo se desarrolló la mañanera de este lunes a cargo de la secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde, en representación del presidente López Obrador, quien participaba en Chile en la conmemoración del 50 aniversario del golpe de Estado y el aniversario luctuoso de Salvador Allende. En casi hora y media —menos tiempo en comparación con el promedio que utiliza el Presidente— la secretaria Alcalde condujo por primera vez las exposiciones y la sesión de preguntas y respuestas, en una mañanera en la que no hubo ataques a la prensa ni anécdotas, ni señalamientos a los neoliberales, fifís ni se habló de García Luna, Felipe Calderón, o de “la señora X”. “Seguiremos promoviendo el diálogo circular y el derecho a la información”, sentenció doña Luisa María.
Citlalli Hernández no ha dormido y no es por el ultimátum
Nos comentan que quien no ha dormido mucho en las últimas horas, y no es precisamente por el ultimátum que le dio Marcelo Ebrard a Morena, es Citlalli Hernández, secretaria general del partido guinda. El pasado domingo, la líder morenista estuvo en el Consejo de Morena en donde se emitió la constancia del nombramiento de Claudia Sheinbaum como coordinadora Nacional de los Comités para la Defensa de la 4T. Y horas después, nos informan, con foto y video, que apareció a 7 mil kilómetros de distancia, en Santiago de Chile para ser más exactos, para estar presente en el homenaje a Salvador Allende en el Palacio de La Moneda. Nos dicen que el sueño no fue impedimento para la morenista, pues se le vio muy animada en el homenaje y hasta aprovechó para hacerse una selfie con su compañera, la senadora Antares Vázquez. (Bajo Reserva, El Universal, p. A2)
1 De frente. El diputado Fernando Morales reprochó a la titular de la Auditoría Superior de Puebla, Amanda Gómez, su prepotencia, al llegar en camionetas blindadas y acompañada de guardaespaldas. El dirigente de Movimiento Ciudadano cuestionó si tiene la calidad moral para mantenerse en el cargo. “Cuando llegué a ese recinto pensé que estaba el señor Barack Obama. Y creo que no son los temas de la Cuarta Transformación llegar en dos camionetas y como con 20 escoltas. Me parece un despropósito. Cuando somos el Congreso más austero del país, al parecer tenemos a la auditora más ostentosa”. La tentación es más grande que las promesas.
2 Estira y afloje. El caso del fiscal Uriel Carmona sigue dando vuelcos legales. Ayer, un tribunal federal ordenó a un juez decretar su liberación por el delito de encubrimiento por favorecimiento en el caso del feminicidio de Ariadna Fernanda, por el que fue vinculado a proceso la semana pasada. Sin embargo, la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México ejecutó una nueva orden de aprehensión por su vinculación en delito de feminicidio en calidad de auxiliador en contra de Ariadna, cuyo cuerpo fue encontrado sin vida en octubre de 2022 en la carretera La Pera-Cuautla. La impresionante maleabilidad de las leyes.
3 Desesperanza. Guadalupe Mora, hermano del exlíder de autodefensas, Hipólito Mora, asesinado el 29 de junio en Felipe Carrillo Puerto, conocido como La Ruana, presenció un ataque perpetrado por grupos del crimen organizado, justo cuando se pronunciaba en la plaza principal de la comunidad ante la invitación hecha por quienes, asegura, son pobladores del lugar organizados con la intención de hacer algo en contra de los grupos delictivos. “Estaba yo ya hablando unas palabras cuando se dejó caer un explosivo que aventaron con un dron”, relató. No hay luz al final del túnel en el gobierno de Alfredo Ramírez Bedolla. Admítanlo.
4 De fiesta. La inseguridad en Toluca, creciente, pues los robos, ejecuciones e incluso las detenciones arbitrarias de los elementos de la policía municipal lo mismo pueden detener a ciudadanos que a integrantes del Cabildo de la propia administración de Raymundo Martínez. En los últimos años, Toluca se volvió un refugio del crimen organizado y de delincuentes comunes, quienes, junto con la policía municipal, delinquen bajo la protección de Martínez. Los policías, con total impunidad, piden “apoyos” de 200 a 500 pesos por cada automovilista detenido. Se les acabará la fiesta en cuanto Delfina Gómez tome las riendas de la entidad. Aguanten.
5 Sólido desempeño. La transformación llegó al sureste de México. Durante el Primer Informe de Gobierno de Mara Lezama, en Chetumal, Quintana Roo, la mandataria resaltó los avances en obras de infraestructura aeroportuaria, carreteras y de salud, así como programas sociales. Hacer rendir los recursos es un rubro que tiene dominado gracias a la operación de las finanzas a cargo de Eugenio Segura, quien mejoró la calificación crediticia de la entidad a la categoría MxA de Standard & Poor’s. Desde el exterior se ve a Quintana Roo con una “robusta posición de liquidez”, lo que generará superávits operativos. Se dice fácil. Se llama buenos manejos financieros. (Frentes Políticos, Excélsior, Nacional, p. 11)
Que mientras el ex canciller Marcelo Ebrard lanzó mensajes con diferentes significados, como que nunca será desleal a AMLO, pero hay que reponer el proceso de selección de coordinador de Morena o se va a organizar un “movimiento político nacional”, es decir, un partido, su sucesora, Alicia Bárcena, consideró que se avecinan tiempos interesantes con la elección de 2024 en la que pelearán por la Presidencia dos mujeres. Dijo también desde Chile, por cierto, que en México no hay ningún riesgo de que esté en peligro la democracia, “para nada”.
Que como “gran insumo” y “oro molido” evaluó la senadora Olga Sánchez Cordero el decálogo pro mujer de la organización Por Ella, Por Todas, aliada de Claudia Sheinbaum, al presentar de nuevo su agenda en voz de algunas de sus integrantes, como la ex priista Mariana Benítez y la ex perredista Lorena Villavicencio. La otrora titular de Gobernación aprovechó para puntualizar que es la derecha la que quiere “montarse” en el movimiento feminista actual “y no les queda”. Ah, bueno.
Que ante los movimientos en Morena y aliados por la Jefatura de Gobierno de Ciudad de México, con Omar García Harfuch, Clara Brugada, Ricardo Monreal y quizá Mario Delgado en la competencia, el Frente Amplio por México lanzará esta semana su convocatoria para definir abanderado el próximo año y espera mantener la unidad, como con la unción de Xóchitl Gálvez. Por lo pronto, la alcaldesa de Cuauhtémoc, Sandra Cuevas, ya anunció que pedirá licencia para contender por la candidatura.
Que el tema ovni llegará este martes a San Lázaro, pues el diputado Sergio Gutiérrez Luna recibirá al periodista Jaime Maussan y a ex pilotos militares estadunidenses que comparecieron ante el Congreso de Estados Unidos semanas atrás para hablar sobre este tema e impulsar una ley que permita abrir archivos. Juntos realizarán la primera audiencia pública sobre este fenómeno y discutirán casos que se han presentado en nuestro país, para tener algún grado de certeza sobre si, como decía el clásico, un mundo nos vigila. (Trascendió, Milenio, Al Frente, p. 2)
Las dudas de Marcelo
Con su mensaje de ayer, quedó claro que Marcelo Ebrard no quiere dejar Morena. Anunció la creación de una nueva corriente política denominada “Movimiento Progresista” y una gira de agradecimiento por todo el país. Lo cierto, sin embargo, es que sus dudas han provocado que pierda fuerza al interior de su partido. Ayer, por ejemplo, algunos legisladores decidieron no acompañarlo en su lucha por la reposición del proceso interno.
Prueba superada
La que superó una gran prueba de fuego fue la secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde, quien encabezó la tradicional mañanera de Palacio Nacional. La joven política no tuvo contratiempos y logró sortear las preguntas que le hicieron los reporteros en el principal ejercicio de comunicación del gobierno federal.
Abiertos al diálogo
Los sacerdotes católicos del país estarán muy activos en este proceso electoral que se avecina. Por lo pronto, ya buscan reuniones con las aspirantes a la Presidencia y el secretario de la Conferencia del Episcopado Mexicano, Ramón Castro Castro, dijo que están abiertos a entablar el diálogo con cualquiera que guste acercarse.
Listos para el desfile militar
En instalaciones de la Secretaría de la Defensa Nacional, que dirige el general Luis Cresencio Sandoval, se realizará este martes la revista general a las tropas que participarán en el tradicional desfile militar del 16 de septiembre. El evento tendrá lugar en el Campo Militar Número 1-A de dónde saldrán los contingentes de las mujeres y los hombres de verde olivo.
Un mundo nos vigila
Hoy, en la Cámara de Diputados, se realizará la primera “Audiencia Pública para la Regulación de Fenómenos Aéreos Anómalos No Identificados en México”. Los invitados de honor serán Jaime Maussan y Ryan Graves, uno de los ex pilotos de la Armada de EU que declararon en el Capitolio sobre el tema. Aceptaron nuestros legisladores hablar de los “ovnis”. (El Heraldo de México, La 2, p. 2)
Baja la ‘4T’ presión sobre el INE
El INE ya no está –al menos no tanto– en la mirilla presupuestaria y de austeridad de la ‘4T’. El nuevo presidente de la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados, Jorge Romero, del PAN, reveló ayer a periodistas que “ya no es el órgano con el que se quieren meter tanto con respecto a su presupuesto, ahora le están poniendo atención a otros organismos o a otro poder (el Judicial)”. Estimó que el diálogo es la mejor ruta. “Nos da gusto que el INE no sea uno de esos organismos que estén en una mira de algún recorte presupuestal importante. Por eso, esta vez se va escuchar y ayudar” a la presidenta del instituto, Guadalupe Taddei, anticipó, con quien tuvieron ayer su primer encuentro privado.
Celia Maya, por el enésimo intento
Celia Maya ha sido propuesta múltiples veces por Palacio Nacional, tanto para ser ministra de la Corte, como para ser gobernadora de Querétaro, entre otros cargos. Sin embargo, siempre se queda en la línea y ve frustrados sus nombramientos, porque no obtuvo el apoyo, ya sea del Senado o de los electores. Pero ahora, según el senador morenista Alejandro Rojas Díaz Durán, “personeros” del gobierno federal, que están en su propia bancada, pretenden imponerla como integrante del Consejo de la Judicatura Federal. El legislador señaló que Maya es militante activa de Morena, por lo que, de acuerdo con la Constitución, no cumple con los requisitos. Todo indica, pues, que doña Celia se volverá a quedar en el “ya merito”.
Las medidas tardías del INE
La virtual precandidata presidencial del Frente Amplio por México, Xóchitl Gálvez, anunció que, por instrucción del INE, en los primeros minutos de hoy eliminaría una docena de tuits en los que, de alguna manera, habla del proceso electoral y de la sucesión presidencial de 2024. Lo curioso es que, antes de eliminar los posts, los volvió a poner en su cuenta, por si alguien no los había visto. Es, pues, tapar el sol con un dedo, pues por más eufemismos y maromas que hizo tanto la autoridad electoral como los bloques partidistas –por supuesto, también Morena y el oficialismo–, a nadie se puede engañar y esto ha sido a todas luces una carrera anticipada.
La hora crucial para Marcelo
Aun cuando dijo que la decisión está en manos del partido, Marcelo Ebrard seguramente sabe que no atenderán sus reclamos y, en consecuencia, tendrá que irse de Morena. Lo que por ahora dejó de lado es la opción de estar “de una u otra manera” en la boleta en 2024. A lo mejor es porque, según nos cuentan, algunos de los legisladores que lo han apoyado hasta el momento no se irían con él. Entre que son fundadores de Morena y que no quieren dejar el partido, marcaron su límite de hasta dónde están dispuestos a seguir al excanciller.
Saludan a AMLO peruanos seguidores de Castillo
A pesar de las tensas relaciones del gobierno de México con Perú, porque no reconoce a Dina Boluarte, el presidente López Obrador encontró arropo en Chile de la comunidad peruana en ese país. “AMLO, amigo, el Perú está contigo”, dijeron simpatizantes, quienes agradecieron también por defender la democracia en su país, pues México se ha pronunciado en contra del derrocamiento de Pedro Castillo.
Le opacan la nota al magistrado Guerra
Las decisiones de Rafael Guerra Álvarez derivaron ayer en tremendo caos. Resulta que el magistrado presidente del Poder Judicial de la Ciudad de México anunció por la mañana, con bombo y platillo, un incremento salarial de 3.5% directo y algunas prestaciones, retroactivo a enero pasado… pero sólo para algunos empleados de la institución. La lógica se impuso y los excluidos opacaron la nota, pues salieron ayer mismo a exigir un trato justo e igualitario. “Si hay aumento para algunos, que lo haya para todos”, decían durante el cierre de Niños Héroes y Patriotismo, entre otras avenidas donde hay instalaciones del Poder Judicial capitalino. Al final se hizo una mesa de diálogo; esperemos a ver en qué resulta. (Confidencial, El Financiero, Nacional, Política y Sociedad, p. 29)
Raspón al antecesor
Y fue el gobernador de Oaxaca, Salomón Jara, el que ayer dio un recargón, nos comentan, a su antecesor, Alejandro Murat. Y es que resulta que el mandatario morenista, al salir al paso de las críticas que provocó la difusión de una imagen en la que se ve que un bebé en una caja de cartón en el hospital Doctor Aurelio Valdivieso —hecho que, por cierto, derivó en ceses—, acusó una campaña y dio cuenta de que recibió ese nosocomio “abandonado completamente”. Defendió que del 1 de septiembre de 2022 al 31 de agosto de este año su administración ha erogado en la instalación hospitalaria 98.5 millones. Y destacó: “Recordemos que además del pésimo estado en el que nos entregaron los servicios de salud en todo el estado, nos heredaron más de 2,400 millones de pesos por adeudos al ISSSTE desde el 2008”. Ahí el dato.
La agenda feminista y Sheinbaum
Con la novedad de que las reacciones por la nominación de Claudia Sheinbaum como coordinadora de la Defensa de la Transformación, traspasaron los territorios partidistas. Y fue el Movimiento Nacional de Mujeres “Por ella, por todas”, del que son fundadoras Lorena Villavicencio, Mariana Benítez y Teresa Ramos, el que ayer dio cuenta del documento “Agenda de las Mujeres para el México que queremos con Sheinbaum”, el cual prevén entregar a quien será la candidata presidencial de la 4T, para que, dijeron, lo considere a la hora de elaborar su plataforma de campaña y, señalaron, en su momento sea su principal programa de gobierno. El texto lo presentaron en un acto público al que asistieron también Olga Sánchez Cordero, Daniela Cordero, Nayeli Fernández y Emilia Vidal.
Equipo de gobierno en el Edomex
Muchas miradas están clavadas estos días en el proceso de configuración del equipo de trabajo de Delfina Gómez, quien asumirá como gobernadora del Estado de México el próximo 15 de septiembre. Se trata de ese proceso en el cual lo que menos ha faltado son especulaciones sobre dónde quedarán diversos jugadores relevantes, nos comentan. Y es que resulta que una de esas versiones indica que el senador Higinio Martínez podría quedar en una secretaría donde se muevan muchos recursos como Obras, Agua o Finanzas, con lo cual sus allegados tendrían en sus manos operación política y financiera, pese a ser objeto de cuestionamientos. Nos hacen ver, sin embargo, que la maestra Delfina Gómez se ha mostrado firme en frenar las imposiciones y a quienes no siempre acompañaron las decisiones del Presidente López Obrador en el pasado. En unas horas veremos la fuerza de cada grupo.
Inédito apoyo a deportistas
Relevante, nos cuentan, la decisión que tomó el gobierno de Guerrero, a cargo de Evelyn Salgado, de apoyar al deporte de su estado. Y es que ayer la administración de la morenista hizo entrega de tres millones de pesos en becas para 83 deportistas y 36 entrenadores de 29 disciplinas, algo que, nos señalan, antes no había ocurrido en la entidad. La propia mandataria aclaró, al hacer entrega de los estímulos, que, al ser la primera mujer gobernadora, “tengo un compromiso muy grande con los jóvenes deportistas, hoy como nunca se le va a dar todo el apoyo al deporte, que Guerrero salga adelante y esté en los primeros lugares a nivel nacional e internacional”. Estableció además el compromiso de que para el año entrante el apoyo al esfuerzo se duplique. “Cuando terminemos este sexenio la meta es que ningún joven deportista, ningún joven talentoso en Guerrero se quede sin el apoyo de su beca”, les dijo.
Con la mirada en otro lado
Quien parece empeñado en aclarar que pronto dejará el cargo para perseguir su siguiente aspiración es el coordinador de Morena en la Cámara de Diputados, Ignacio Mier, nos comentan. Y es que ahora, sin que nadie le preguntara, aprovechó una entrevista con medios para mencionar que “en todas las encuestas serias, dicen, sin afán propagandístico, que yo las encabezo”, y además aseguró que no dejará nada inconcluso en San Lázaro. Sin embargo, nos hacen ver que su partida no sería tan tersa, primero porque son varias las encuestas que traen, pero al otro Mier, que es senador muy adelante del diputado, y además hay que sumarle que no sólo abandonará al grupo parlamentario, de cara al final del sexenio, sino también en medio de los efectos del proceso morenista que, se ha advertido, podría fragmentarlo en, al menos, dos partes: quienes van con Claudia y quienes no sueltan a Marcelo. Pero mientras… qué chula es Puebla.
Libros de texto, la suspensión sigue
Con la novedad de que Luis María Aguilar, uno de los ministros de la Corte a quien en Palacio últimamente han traído entre ceja y ceja, rechazó levantar la suspensión que determinó aplicar sobre el reparto de libros de texto en Chihuahua, lo que, nos comentan, representa un nuevo revés para la Consejería Jurídica de la Presidencia, encabezada por María Estela Ríos. Y es que dicha oficina y la Secretaría de Educación Pública, a cargo de Leticia Ramírez, solicitaban levantar la suspensión y poder repartir los materiales al considerar que la situación cambiaba con la publicación que se hizo de los programas de estudio en el Diario Oficial de la Federación. Pero ha quedado claro que el tema de fondo es determinar si en la elaboración de los libros se cumplieron los requisitos que establece la Ley de Educación. Pendientes. (Rozones, La Razón, LA DOS, p. 2)
Exclusividad de consultas
El gesto que asumió ayer el líder de Morena en la Cámara de Diputados, Ignacio Mier, con el INE, dejó con el ojo cuadrado a más de uno. Resulta que como la coalición oficialista planea incluir en su plataforma electoral la reforma al Poder Judicial, entonces considera que el INE ya no necesita pedir recursos para la consulta popular. Ahora resulta que Morena tiene la exclusividad para solicitar consultas y se le olvida que legisladores y ciudadanos tienen ese derecho para algún otro tema, como establece la ley. ¿Así, o más autoritario? ¿Será?
Prioridad en el Congreso
… y tal vez es por eso que en el llamado Frente Amplio pusieron especial atención a un comentario realizado en la reunión morenista de este fin de semana: además de buscar la Presidencia del país, la 4T hará lo necesario para hacerse de la mayoría en el Congreso federal y, así, plantear ¡Una nueva Constitución! Lo anterior hizo que varios en la oposición urgieran a mandar a sus mejores candidatos posibles para competir por las curules del Senado y la Cámara de Diputados, pues los cuartotransformistas no sólo advirtieron que echarán atrás todas las “reformas neoliberales”, sino que van por la conformación de un nuevo Poder Judicial y la desaparición de varios organismos que, hasta el momento, gozan de autonomía. ¿Será?
…Otra vez Guerrero
Ni la gobernadora Evelyn Salgado, ni la presidenta municipal de Acapulco, Abelina López, parecen darse cuenta de la emergencia que se vive en su estado, ya no basta echarle la culpa de la violencia al sexenio de Felipe Calderón, ni a las políticas neoliberales, el sexenio del presidente López Obrador está por concluir y a pesar de que los tres órdenes de Gobierno son del partido que se comprometió a terminar con este problema, la entidad se tiñe de rojo: ayer, por ejemplo, se encontraron los cuerpos de cinco jóvenes desmembrados… De verdad, ¿ni en Palacio Nacional se percibe la tragedia de Guerrero? ¿Será?
Protesta y descanso
En el Tribunal Superior de Justicia de la CDMX, iniciaron la semana sin actividades en demanda de aumento salarial y prestaciones del 7.7% y el pago inmediato del retroactivo, el aumento de vales de despensa y de fin de año, el incremento al estímulo económico de fin de año y hasta la exigencia de días económicos sin el visto bueno del titular del área… ¿Y su nieve de qué la quieren?, por cierto, dicen que el viernes 15 de septiembre no habrá actividades, por aquello de la preparación para la conmemoración del aniversario del Grito de Independencia. ¿Será?
Hermetismo en el INE
Vaya que soplan tiempos de cambio en el INE. A la consejera presidenta, Guadalupe Taddei, no le gusta responder a las preguntas de los medios de comunicación. Ayer fue a la Cámara de Diputados a presentar su proyecto de presupuesto, comió con los coordinadores en la Jucopo, pero ni una respuesta quiso dar fuera del protocolo. ¿Será aversión, miedo, despreció, inseguridad?, lo cierto es que su equipo tiene la instrucción de no permitir ningún “chacaleo”… ¿Será? (¿Será?, 24 Horas, PÁG. 2)
Marcelo Ebrard no se fue ayer de Morena para jugar políticamente por la libre contra el presidente Andrés Manuel López Obrador y la eventual candidata presidencial, Claudia Sheinbaum, pero está en el umbral de hacerlo. Este lunes subió la presión sobre todo el aparato gobernante al advertir que, si no resuelve a su favor la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia del partido su impugnación al proceso del que emergió Sheinbaum como eventual candidata presidencial, se irá del instituto político. Una vez más, Ebrard le arrebató a López Obrador la iniciativa y arrinconó a su rival, a sabiendas de que a su permanencia en Morena le quedan unos cuantos días de vida.
Ebrard lo sabe desde el 1 de septiembre, cuando pidió una cita con López Obrador para mostrarle las irregularidades que documentó sobre el proceso. El Presidente nunca lo recibió, lo que debió de haber anticipado el excanciller porque desde principios de agosto, cuando López Obrador habló con él a propósito del asesinato de su operador financiero en Guerrero, José Guadalupe Fuentes, ya no volvió a tener comunicación con su excolaborador. A diferencia del trato con Sheinbaum y el propio Adán Augusto López, el tabasqueño caído en desgracia en Palacio Nacional, a Ebrard lo mandó a la congeladora.
La decisión que tomó Ebrard después de ver que la puerta del despacho presidencial se le había cerrado en definitiva, no fue de moderación y recorte de pérdidas, sino de elevar el costo del resultado y reventar el proceso. Por esa razón sus representantes en la Comisión de Encuestas de Morena, Martha Delgado y Malú Micher, buscaron descarrillarlo desde el segundo día de haber iniciado, buscando la anulación del mayor número de secciones para alegar que no había existido representatividad, y provocaron un conflicto con la policía el día que se anunciaron los cómputos de las casas encuestadoras.
No funcionó la estrategia mediática porque todas las casas encuestadoras coincidieron en los resultados, y éstos estuvieron alineados a lo que todas las encuestas, por más de un año de medir a Sheinbaum y Ebrard, publicaron. La estrategia política que siguió Ebrard fue enmarcada en lo jurídico. Por eso impugnó el proceso el domingo por la noche, cuando se cumplía el plazo para presentarla, ante la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia del partido. No hay un término para resolver, pero no deberá demorar mucho.
Ebrard afirmó este lunes que si no se atendían las irregularidades que denunció, “ya no tendría interés en seguir en Morena”. Sheinbaum revisó el documento de Ebrard y dijo ayer que no tenía “mucho fundamento” su queja. Pero aunque lo tuviera, la comisión está integrada por incondicionales de López Obrador y aliados de Sheinbaum, por lo que de antemano se puede saber su fallo. No lo dijo Ebrard, pero le quedaría una instancia adicional, el Tribunal Electoral, la última ventanilla a la que puede recurrir.
La salida de Ebrard de Morena ha sido en cámara lenta porque es el ritmo que ha impuesto desde el principio. Primero forzó al Presidente, en aras de mantener la unidad, que se aceptaran sus términos para que renunciaran los aspirantes a la candidatura y que la pregunta de la encuesta fuera sólo sobre a quién querían los ciudadanos como candidato. Luego, para evitar un quiebre, Ricardo Monreal le cedió su lugar para que Ebrard tuviera la encuestadora de su preferencia, realizando los estudios espejo. Después, durante el levantamiento de las encuestas, el equipo de Sheinbaum –y de otros contendientes– accedió a la mayor parte de las quejas, algunas infundadas, que presentaron Delgado y Micher.
La pregunta natural es por qué, si sabía el destino que le esperaba, porque no aceptará que Sheinbaum se convierta en su jefa política y sea ella quien decida su futuro, no renunció a Morena y evitó abrir un juego de ajedrez difícil ante un adversario como López Obrador. Se puede plantear, con la estrategia mostrada hasta el momento, que Ebrard ha estado buscando que la decisión sobre su permanencia en Morena no recaiga primariamente en él, sino en el Presidente, Sheinbaum o el partido. López Obrador no lo hará, y aunque ha sido muy duro con sus palabras, lo ha sido en el fondo, no en la forma. Sheinbaum, aunque el hígado se le parta, tampoco va a caer en la provocación. La apuesta es Mario Delgado, y que sea él quien estalle y le dé la justificación pública para que sea el verdugo y le transfiera todo el costo de su salida de Morena.
El juego de Ebrard ha sido inteligente y cuidadoso. Su fraseo lo muestra. “¿Estas prácticas son válidas en Morena?”, preguntó. “¿Así va a ser? ¿Todas las encuestas que vienen, vamos a ver lo mismo?”. También acusó al partido de haber dado una carta de naturalización a gobernadores, alcaldes y sindicatos, para que intervinieran en el proceso, pero ha cuidado a López Obrador. Está dispuesto a romper con Morena, pero no con el Presidente, por lo menos hasta ahora.
Ebrard aprendió de la experiencia de su mentor, Manuel Camacho, y de sus errores cuando se rebeló porque no le dieron la candidatura presidencial en 1994. Camacho quemó muchos puentes y su fortaleza se convirtió rápidamente en debilidad. La bala que mató al candidato Luis Donaldo Colosio lo mató políticamente. Ebrard, en cambio, desarrolló una estrategia gradual y fue agotando las instancias.
Al elevar el tono de denuncia sobre los dados cargados a favor de Sheinbaum desde hace más de tres años, lo colocó en una clara ruta de colisión que lo iba a poner frente a una disyuntiva: si no lograba desconcentrar a Sheinbaum y obligarla a cometer errores que la hicieran inviable como la heredera del lopezobradorismo, construiría una salida digna que pudiera darle viabilidad y vida política fuera de Morena.
Ebrard llegó al final de este camino y sólo espera agotar la última instancia. Se irá y será un jugador político en el futuro. Qué tan influyente, dependerá de las negociaciones que haga con la oposición durante los días que el escenario para abandonar Morena madure. (Raymundo Riva Palacio, El Financiero, Nacional, Política y Sociedad, p. 32)
Nadie se compra el cuento de que el acto de rebeldía de Marcelo Ebrard no debe verse como un pleito directo con AMLO. ¡Es una afrenta de valores entendidos!
La impugnación del excanciller en el partido y que seguro será llevada al Tribunal Electoral, rompe el acuerdo interno que él mismo firmó para aceptar los resultados del proceso interno en el que Claudia Sheinbaum resultó ganadora de la representación de los Comités de Defensa de la Cuarta Transformación y con ello tener el pase directo como candidata presidencial de Morena en 2024.
Diferentes versiones desde adentro de Morena tratan de explicar off the record lo que está pasando de cara al proceso presidencial de 2024. Están los que argumentan y acusan una traición por parte del presidente a Ebrard, quien con su declinación en 2000 lo ayudó a ser jefe de gobierno. (Bueno, ahí AMLO le correspondió con la candidatura al mismo puesto de manera inmediata). En 2011, Ebrard se abrió al aceptar su derrota y al reconocer que López Obrador lo superó con tres puntos en las encuestas internas, aunque en corto diga que se vio obligado por el carácter autoritario del tabasqueño.
Ebrard huyó del país en 2015 para refugiarse en Francia al acusar una persecución política de Miguel Ángel Mancera y Miguel Ángel Osorio Chong, quienes lo señalaron de filtrar documentos en lo que se basó un reportaje para destapar el escándalo de la Casa Blanca de Peña Nieto, de la que se hizo por favores políticos.
Es aquí de donde se agarra la otra versión de la historia, que dice que Ebrard es un mal agradecido porque después de dos años de exilio en Francia y Estados Unidos, fue López Obrador quien lo rescató políticamente al unirlo a él y a Morena.
A pesar del desastre en la Línea 12 del Metro tuvo siempre el cobijo de AMLO, aún cuando se documentaron los problemas de origen en la construcción y la entrega acelerada al exigir Ebrard la inauguración anticipada porque se acercaba el final de su periodo como jefe de gobierno y quería resultar favorecido para sus aspiraciones presidenciales. justo para enfrentarse con López Obrador en las encuestas internas del PRD, cuando ambos aún eran militantes.
La pregunta es si al declararle la guerra política a AMLO y a Sheinbaum, a Marcelo Ebrard le va a alcanzar para seguir sin investigaciones en su contra por lo de Tláhuac. La declaración de guerra abierta y sin tregua la soltó ayer el propio excanciller cuando de forma indirecta anunció la creación de un nuevo partido político, legisladores cercanos a él confiaron que se está pensando en el nombre de Movimiento Progresista.
Se trata de empezar con un Movimiento Político Nacional que tendrá su semilla el 18 de septiembre curiosamente un día después de que Sheinbaum arranque su nueva ruta por todo el país para reencontrarse con las bases morenistas de cara a la presidencial de 2024, como nos lo adelantó Alfonso Ramírez Cuellar, encargado de la red #EsClaudia. O sea, el resentimiento de Ebrard es tan grande que está decidido a intentar boicotear a la exjefa de gobierno.
¿Hasta dónde va a llegar Ebrard en su afrenta con AMLO? La pregunta también debería hacérsela el propio Dante Delgado, líder nacional de Movimiento Ciudadano, para saber hasta dónde le conviene o no aliarse con el excanciller.
UPPERCUT: Obligada por el INE, Xóchitl Gálvez tuvo que bajar 12 publicaciones de sus redes sociales por violar la ley electoral. Por eso nadie debe sentirse segura o seguro de que con los actos anticipados de campaña tienen asegurada las precandidaturas o candidaturas. Decíamos en días pasados de que con los lineamientos impuestos por el INE se sienta un precedente y las inconsistencias de los actos anticipados se van a ir sumando en una la lista que puede convertirse en su peor obstáculo a la hora de la verdad. (Alejandro Sánchez, El Heraldo de México, Online)
Marcelo Ebrard no quiere romper con López Obrador. Porque motivos tiene y desde hace tiempo. La cancha dispareja de la que se quejó Ebrard hace meses fue construida por el presidente. Ebrard sabe que, sin el aval de AMLO, la millonaria cargada a favor de Claudia Sheinbaum no hubiera sucedido. Claudia no le hizo nada. Se lo hizo Andrés Manuel. Pero Ebrard no toca al presidente. No lo culpa, no lo señala, no dice una sola frase negativa de él. Para no apuntar al verdadero responsable de que el gobierno federal, los estatales y el partido se pusieran a las órdenes de una de las corcholatas, Ebrard se lanza contra Claudia Sheinbaum, Mario Delgado y Alfonso Durazo.
El excanciller ha tenido varias oportunidades de romper y no ha querido. La más reciente fue ayer. Pero no la tomó. Ebrard parece que quiso comprar tiempo: anunció —como AMLO tras la elección del 2006— una gira por todo el país para denunciar el fraude que le hicieron dentro de su propio partido, presentó una denuncia formal ante Morena y dijo que va a esperar un mes a que resuelvan.
Ah, y oootra vez amenazó con que, si el partido no hace nada, se va. Es la tercera vez que amenaza con lo mismo, y como el presidente y Morena no hacen nada, Ebrard va posponiendo su ultimátum. Marcelo y el lobo. Cada día que pasa, la amenaza asusta menos.
A Ebrard se le agotan los buenos escenarios. Pudo romper cuando la oposición no tenía candidato. Ahorita ya tiene, y entusiasma. Pudo romper antes de que las cinco encuestas —hasta la suya— lo mostraran en un lejano segundo lugar en la contienda interna de Morena. Ahorita es el perdedor y cada minuto se ve menos como el demócrata indignado y más como el hermano ardido porque papá le dio el juguete a la hermanita.
En Morena no van a quitar a Claudia para ponerlo a él. Y mientras Marcelo recorre el país clamando ¡fraude! sin el apoyo de la estructura ni de los gobernadores, Sheinbaum va a estar en plan sucesora, tomando decisiones y repartiendo candidaturas de la mano del presidente. Si termina arreglándose, a ver qué logra negociar a cambio de quedarse.
Y en la oposición no van a quitar a Xóchitl para ponerlo a él. Si realmente quiere cobrarse el agravio, que rompa con Morena y se sume al bloque opositor. Y a ver qué negocia a cambio.
Un escenario cada vez más remoto es que desde Movimiento Ciudadano pueda construir una candidatura que crezca a niveles competitivos. Así como va el ritmo de las campañas parece más probable que se quede en una candidatura testimonial de alguien que optó por la tibieza: en el momento de las definiciones, no quiso ser gobierno ni quiso ser oposición.
Nunca hay que subestimar la capacidad de sorpresa que tiene la política mexicana, pero en este momento, me da la impresión de que a Ebrard el tiempo le juega en contra. Y cuando cree que está comprando oxígeno, en realidad se le está agotando. (Carlos Loret de Mola, El Universal, Nación, p. A6)
Al presentar una impugnación que de entrada ya descalificó Claudia Sheinbaum porque “no tiene mucho fundamento” y condicionar su permanencia en Morena a la respuesta que le den a su queja, Marcelo Ebrard confirma que la estrategia que preparó cuidadosamente desde antes de empezar este proceso interno y que ahora está siguiendo para preparar su salida formal del movimiento lopezobradorista, no es si no una copia de la misma estrategia que hace 29 años siguió Manuel Camacho Solís cuando Carlos Salinas de Gortari optó por Luis Donaldo Colosio, y no por él, para la candidatura del PRI a la Presidencia en 1994.
Descalificar el proceso, negarse a aceptar la decisión y no acudir a reconocer el triufo de Sheinbaum –“haiga sido como haiga sido”— fue la primera parte del plan ebrardista que siempre supo que él no sería el elegido y optó por emular lo que hizo su mentor político en aquel año aciago en el que la violencia política asomó su rostro en México con toda su crudeza. Si lo primero fue desconocer a Claudia como la elegida por la encuesta alegando diversas irregularidades, lo que ayer anunció Marcelo Ebrard es el lanzamiento de una campaña paralela —como la que le hizo Camacho a Colosio— y la creación de una nueva plataforma política que denominó “Movimiento Progresista”.
Recorrer el país al mismo tiempo que lo hará la virtual candidata de Morena será sin duda la otra parte de la estrategia de Marcelo para minar a Claudia, hacerla parecer débil y que no tiene todo el respaldo de los grupos internos del partido, más allá del apoyo incondicional que le brindó el presidente López Obrador. Si Camacho Solís buscó y utilizó el nombramiento de “Comisionado para la Paz” en Chiapas que le otorgó Salinas, Ebrard utilizará su propia plataforma para ir por toda la República a partir del 18 de septiembre con un objetivo más que claro: mostrar que su candidatura presidencial no está muerta, que la unidad morenista es más un discurso que una realidad (por eso llama a los militantes del partido y a los aliados del PVEM y el PT a que se sumen a su movimiento) y, sobre todo, a demostrar que Sheinbaum no tiene la capacidad ni para manejar el mando político que le entregó AMLO ni para conquistar al electorado.
Lo que seguiría, en el manual camachista para sabotear una campaña, es que se empiece a hablar de que “la campaña de Claudia no prende ni entusiasma”, que “a la candidata le falta experiencia y carisma”, y así hasta llegar a hablar de posibles candidatos sustitutos, tal y como ocurrió en aquellos primeros meses de 1994, cuando Manuel Camacho, con Ebrard como su joven alumno y operador, lograron sembrar la percepción de que la campaña de Colosio no levantaba hasta que vino aquel discurso mítico del 6 de marzo en el monumento a la Revolución.
A nadie debe extrañar que Marcelo Ebrard, en su decisión de no aceptar la decisión de Morena y de López Obrador y jugarse su última carta, decida declararle la guerra política, una guerra estratégica y soterrada a Claudia Sheinbaum, aunque su verdadero pleito no es con la doctora, sino con quien la puso. Si Camacho la emprendió contra Colosio como una forma de vengarse de su hermano, Carlos Salinas de Gortari, que no cumplió los acuerdos que tenían ni le entregó la candidatura que él sentía suya; hoy Marcelo también enfoca sus baterías contra Claudia, aunque su verdadero objetivo es Andrés Manuel, con quien está enojado por haberlo llamado “hermano” y no haberle reconocido, con la candidatura, su lealtad y amistad cuando lo dejó pasar, hasta en tres ocasiones, habiéndose él sacrificado.
Sin duda todos los paralelismos encajan en los pasos del Marcelo de hoy y el Manuel Camacho de ayer. Los dos están molestos y decididos a cobrarse lo que consideran un acto de “ingratitud y maltrato” por parte de quienes consideraban sus “hermanos”. Podría decirse que López Obrador no es Salinas, pero al final los dos representan quizá a los dos presidentes más políticos y perversos de los últimos tiempos.
Lo único en lo que no debiera, bajo ninguna circunstancia esperar o buscar un paralelismo, es en la violencia criminal y política que nos estalló a todos en la cara aquel 23 de marzo de 1994; empezando por Camacho Solís, al que le gritaron “¡asesino!” a su llegada a Gayosso al sepelio de Colosio, y siguiendo por todo un país y una generación de mexicanos que asistíamos horrorizados a una violencia política que no conocíamos. Eso si nadie quiere que se repita y quien lo invoque o lo provoque será repudiado y rechazado por los votantes.
NOTAS INDISCRETAS… La imagen del presidente López Obrador y de su esposa Beatriz Paredes Müller en Santiago de Chile, vestidos todos de negro, en señal de luto, y portando un clavel rojo cada uno en sus manos, pudiera parecer una muy buena idea de sus estrategas de imagen para mostrar su respeto y solidaridad con el pueblo chileno a 50 años del golpe de Estado que derrocó con la rebelión militar al presidente Salvador Allende.
Pero si esa misma imagen se traslada al contexto mexicano de violencia descarnada, donde todos los días hay muertos, balaceras, desapariciones y masacres en varios estados de la República, entonces la idea ya no parece tan buena. Porque mientras el presidente y su esposa se ven vestidos para la ocasión, con el color de luto de pies a cabeza y el detalle planeado del clavel rojo en sus manos, para condolerse de la tragedia vivida por los chilenos hace medio siglo, en México donde el gobierno que López Obrador encabeza lleva hasta hoy más de 165 mil mexicanos muertos por la violencia del narcotráfico, ni él ni su esposa han tenido en cinco años el detalle de vestirse de luto y menos condolerse, más allá del discurso y las palabras, por las vidas de tantos mexicanos asesinados y desaparecidos en este país.
Está muy bien que el presidente haga política exterior y refuerce los lazos históricos con Chile, país al que México y su embajada ayudaron hace 50 años sacando a miles de chilenos perseguidos por la dictadura de Pinochet; pero qué mal que el mismo López Obrador y su esposa solo sientan el luto y el gesto de solidaridad hacia las víctimas chilenas de hace 50 años y no hacia las víctimas mexicanas de todos los días, del presente y de los que le faltan aún en el año que le queda de gobierno donde las propias proyecciones oficiales hablan de una cifra histórica que podría rebasar los 180 mil asesinatos violentos.
Qué bueno que al presidente y a su esposa los hayan vestido para la ocasión en Chile; qué malo que acá ambos no se permitan ni siquiera la ocasión para dolerse de tantos muertos y tanta violencia en México… Se baten los dados. Serpiente y descendemos. (Salvador García Soto, El Universal, Nación, p. A8)
El domingo, en su discurso ante el Consejo Nacional de Morena –que le entregó su constancia como ganadora del proceso interno para definir la candidatura presidencial del oficialismo–, Claudia Sheinbaum convocó a “personas de todas clases sociales, de corrientes del pensamiento, de todas las religiones, librepensadores, campesinos, trabajadores, clases medias, artesanos, científicos y empresarios, jóvenes y mujeres, a quienes viven fuera de México, a construir el segundo piso de la transformación”.
Sobresale en ese llamado la mención a sectores de la sociedad que han sido abiertamente hostilizados por el actual gobierno, al que Sheinbaum pretende dar continuidad. Por ejemplo, los librepensadores, a quienes el presidente Andrés Manuel López Obrador ha criticado por no cerrar filas con su gobierno y tener una postura independiente, de la cual se ha mofado y puesto en duda. O los científicos, a quienes se retiró el apoyo presupuestal, se llamó “machuchones” y se criticó por hacer “turismo académico” y por ser adictos a los “lujos” e, incluso, se les acusó penalmente.
O la clase media, sobre la que ha caído una lluvia de adjetivos desde la conferencia mañanera: “aspiracionistas sin escrúpulos morales”; “individualistas que dan la espalda al prójimo”; “partidarios de ‘el que no transa no avanza’”, y pilar del “conservadurismo”, etcétera. Esta última ha sido clave en las más recientes elecciones presidenciales. Desde que se desmoronó el corporativismo priista a fines del siglo pasado, los candidatos ganadores han fincado su triunfo en el apoyo de la clase media. Así fue para Vicente Fox, Felipe Calderón, Enrique Peña Nieto y Andrés Manuel López Obrador. Ha quedado claro que para llegar a Palacio Nacional hace falta conquistarla.
En las elecciones legislativas y municipales de 2021, el voto de la clase media fue fundamental en los distritos y alcaldías que recuperó la oposición de manos del oficialismo. La pregunta, de cara al 2024, es si Sheinbaum logrará revertir esa pérdida. Como han mostrado los resultados de las últimas cuatro elecciones presidenciales, hay una lista de diez estados –Aguascalientes, Baja California, Coahuila, Colima, Chihuahua, Jalisco, Querétaro, San Luis Potosí, Sonora y Yucatán– que siempre gana quien se lleva la Presidencia de la República. Dichas entidades federativas tienen una fuerte presencia de la clase media.
El jueves 7, tres días antes de que Sheinbaum hiciera su llamado, el presidente López Obrador pareció decir que ese sector social no es importante para el oficialismo, al afirmar que si Marcelo Ebrard se presentara como candidato, él tendría “más jale” con la clase media que la frentista Xóchitl Gálvez. En ningún momento mencionó si existe interés de los clasemedieros en votar por Sheinbaum, quien el domingo dijo que busca su apoyo.
BUSCAPIÉS
* El excanciller Marcelo Ebrard anunció ayer que llevará adelante su impugnación al proceso interno de Morena. La víspera, presentó ante la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia una demanda de nulidad y posterior reposición de la elección de la Coordinación Nacional de Defensa de la Cuarta Transformación, con base en la documentación de actos de violencia y condicionamiento de programas sociales, entre otras presuntas anomalías. Dio a conocer que el 18 de septiembre iniciará una gira nacional para informar sobre su queja, un día después de que Claudia Sheinbaum comience la suya.
* Así como los demócratas de cualquier signo ideológico deben estar en contra de los cuartelazos, como el que hace medio siglo tiró del poder al democráticamente electo presidente chileno Salvador Allende, también deben oponerse a toda intervención gubernamental en los procesos electorales a favor de su partido, incluyendo las maniobras para debilitar a las autoridades encargadas de organizar y calificar los comicios. Hacer otra cosa es pura hipocresía y deja también una mancha indeleble, de ésas que no se borran con toda el agua del océano. (Pascal Beltrán del Río, Excélsior, Nación, p. 2)
De pie sobre los hombros de Luis Echeverría, Emilio Rabasa y Gonzalo Martínez Corbalá, el presidente Andrés Manuel López Obrador rindió homenaje a Salvador Allende, primer líder marxista electo en América Latina, mandatario chileno depuesto en un golpe sangriento.
Era digno y significativo, que un Presidente mexicano estuviera en la conmemoración de los 50 años del golpe. La actitud mexicana frente al cuartelazo chileno fue siempre de rechazo, y fue la diplomacia de un gobierno del Partido Revolucionario Institucional (PRI) la que lo mantuvo desde el día del ataque hasta el momento en que salió el último refugiado de su Embajada en Santiago –que cerró en 1974 y reabrió en 1990–.
Fue también el conducto para que saliera al mundo la información real de la situación.
Martínez Corbalá no era diplomático de carrera, pero sí un político que llegó a ser diputado y senador, así como gobernador de San Luis Potosí, siempre en el marco del PRI.
Cierto, era un PRI previo a los tiempos neoliberales y al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), pero era el mismo que aplaudió la represión de 1968 y asumió la matanza del 10 de junio de 1971; ese mismo PRI abrió la puerta de par en par a los chilenos, argentinos, bolivianos y, en alguna medida, brasileños y uruguayos que huían de dictaduras militares y buscaban refugio en México.
Y cualquiera que haya sido su ideología, hizo lo correcto por lo menos en este sentido. En la práctica, las embajadas de México en varios países de la región fueron un salvavidas y refugio para perseguidos políticos, que eran entonces, sobre todo, de izquierda.
La tradición inaugurada en los años 30 y agigantada durante la Guerra Civil española se convirtió en un sello.
Ahora el punto de continuidad política está hecho y marcado, aun cuando el actual gobierno mexicano haya optado por destacar únicamente la figura de Martínez Corbalá y omitido que no actuó solo, sino que era parte de un aparato con el que el régimen actual se siente incómodo, pero no puede dejar de lado.
Porque es de dudarse que alguno de los diplomáticos enviados por la Cuarta Transformación hubiera hecho algo diferente, aunque sus creencias políticas puedan variar de las que hayan tenido personajes como Rabasa, Antonio Carrillo Flores, Alfonso García Robles y Jorge Castañeda de la Rosa.
Fue en esa década también cuando la diplomacia mexicana le puso el cascabel al gato ante los conflictos centroamericanos, y promovió con Colombia, Venezuela y Panamá la creación del “Grupo Contadora” para hallar soluciones de paz en Centroamérica, y quién sabe cómo habrían reaccionado a la inspiración autoritaria de Nayib Bukele, en El Salvador, o la monumental traición montada por lo que ahora es la dictadura somorteguista en Nicaragua.
Desde luego, hay quien define a la diplomacia y la política como el arte de tragar sapos sin dejar de sonreír, y por eso es siempre placentero recordar grandes momentos históricos, aunque haya que dejar los detalles bajo el velo del olvido. (José Carreño Figueras, El Heraldo de México, Orbe, p. 31)